VOLVIENDO A NACER
Así como hay un solo nacimiento en lo físico, también hay un nacimiento espiritual, que viene al tener una experiencia personal con Jesús.
Nicodemo era un fariseo y líder entre los judíos. Tiene una conversación con Jesús donde podemos ver claramente el significado del nuevo nacimiento:
Juan 3:2-8 Maestro, nosotros sabemos que Dios te envió a enseñarnos porque nadie sin la ayuda de Dios puede hacer las señales milagrosas que tú haces.
3 Jesús le respondió:
—Te digo la verdad: el que no nace de nuevo, no puede tener parte en el reino de Dios.
4 Nicodemo le dijo:
—Pero si uno ya es viejo, ¿cómo puede nacer de nuevo? ¿Acaso puede regresar al vientre de su mamá y nacer otra vez?
5 Jesús respondió:
—Te digo la verdad: el que no nace de agua y del Espíritu, no puede entrar al reino de Dios. 6 El que nace de padres humanos tiene vida física, pero el que nace del Espíritu tiene vida espiritual. 7 No te sorprendas si te digo: “Ustedes tienen que nacer de nuevo”. 8 El viento sopla para donde quiere ir. Tú lo escuchas soplar pero no sabes de dónde viene ni para dónde va. Así es con todos los que nacen del Espíritu.
Cuando leemos lo que Jesús le dice a Nicodemo podemos ver la gran verdad, lo que significa seguir a Cristo. No se trata de asistir y congregar en una iglesia, no se trata de hacer un retiro espiritual ni llevar una escuela en teología. Seguir a Cristo significa vivir en lo espiritual y VOLVER A NACER.
EL que ha vuelto a nacer, es una nueva criatura. Entonces ya no eres el mismo, tus intereses cambian, ya no buscas un buen esposo o esposa, una buena casa o un mejor carro. Todo eso ahora es considerado sin importancia por ir al llamamiento Supremo de Cristo. Ahora te interesa la paz mundial, el gozo y dar tu vida por lo demás. La Transformación Real tiene como punto de partida EL NUEVO NACIMIENTO.
El que ha nacido de nuevo siempre se está inclinando a lo espiritual, se deleita en la palabra de Dios, tiene hambre y sed de lo espiritual. No tiene una mente perfecta, pero tiene una mente arrepentida, y a una mente arrepentida ya no le es fácil pecar, ya no le resulta fácil intoxicarse con tabaco, alcohol, adulterio o pornografía. Tu vida cambia y entiendes que seguir a Jesucristo no es religión ni un estilo de vida. Seguir a Cristo significa UNA NUEVA VIDA.
Dios tiene cosas maravillosas para ti, sus promesas son eternas y hoy puedes activarlas en tu corazón. Las cosas viejas han pasado y todo puede ser nuevo. El apóstol Pablo dijo: Me olvido del pasado y me esfuerzo por lo que esta adelante. Adelante, te espera una vida con propósito.
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